El Desengaño ((“Disinganno”, 1753), de Francesco Queirolo.)
Un espíritu alado, un ángel, con una llama en la frente como símbolo del
intelecto humano, ayuda al hombre a liberarse mientras señala el globo a sus
pies, símbolo de las pasiones mundanas. Un libro abierto descansa sobre el
globo: es la Biblia, un texto sagrado. El bajorrelieve del pedestal, con
la historia de Jesús devolviendo la vista a los ciegos, acompaña y fortalece el
mensaje de la alegoría.
La obra, esculpida en un solo
bloque de mármol, era tan ambiciosa que se consideró imposible de realizar, y
por ello, de entre todos los maestros del país, solo Queirolo se atrevió a
ejecutarla. Sí, la red es de mármol. Es algo magnifico!!! Aunque parezca
mentira, la red forma una sola pieza con el resto de la escultura. En su
libro Istoria dello Studio di Napoli (1753-54), Giangiuseppe Origlia
define esta estatua como ‘la última y más difícil prueba a la que puede aspirar
una escultura de mármol’. Se refiere al trabajo hecho con la red que ha
sorprendido a viajeros desde hace varios siglos
Se dice que Queirolo tardó
siete años en esculpir la red de mármol, que elaboró sin un taller,
aprendices u otra forma de ayuda externa. La razón de esto, según el Museo de la
Capilla Sansevero, fue que incluso los escultores más especializados
“se negaron a tocar la delicada red en caso de que se rompiera en sus manos”.
La novelista del siglo XX
Matilde Serao la describió poéticamente como “un cierre singular de la
vida, un término singular para todas las sublimidades, todas las pasiones, todos
los amores”. Concluye: “Liberación del engaño y nada más”.
La obra se puede ver en la
capilla Sansevero de Nápoles.
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